Ofrecen con ballet un momento de olvido de las bombas y los drones

Tres años después de la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania, para muchos habitantes de la ciudad ucraniana de Járkov la guerra tiene un costo mental. Pero hay un espacio en la ciudad donde, por unas fugaces horas, la guerra deja de existir.
En el oscuro sótano con paredes de ladrillo del Teatro Académico Nacional de Ópera y Ballet de Járkov, una compañía de danza ha creado un espacio protegido de drones y bombas donde el público puede perderse en representaciones de ballets clásicos.
En abril, el espacio albergó las representaciones de Chopiniana, un ballet de principios del siglo XX con música de Frédéric Chopin. A pesar del improvisado escenario, el ballet se representó con toda la pompa clásica, con cuerpo de baile y orquesta.
Esto marcó un hito para la vida cultural de Járkov porque fue la primera presentación completa de un ballet clásico en la ciudad desde febrero de 2022, cuando las tropas rusas invadieron Ucrania.
A pesar de todo podemos darle un regalo maravilloso a la gente”, dijo Antonina Radiievska, directora artística de Opera East, la compañía de ballet que presentó el espectáculo. “Pueden venir y, aunque sea sólo por una o dos horas, sumergirse por completo en un mundo diferente”.
El auditorio tiene capacidad para 400 personas en sillas apilables. La acústica del sótano, según los artistas, no está a la altura de la imponente amplitud del teatro principal, con capacidad para mil 750 espectadores.
Pero lo que le importa a Radiievska es que, después de una larga pausa, puedan volver a actuar de la mejor manera frente al público.
Ucrania necesita una cantidad inicial de 566 millones de dólares para reconstruir las instalaciones de infraestructuras más importantes de sus puertos del mar Negro, destruidas por los constantes ataques rusos con misiles y aviones no tripulados, dijo Andri Kashuba, viceministro de Desarrollo Territorial, en el Foro de Seguridad del mar Negro celebrado en Odesa.